El Grana cayó frente a Tigre 2-1, y los hinchas volvieron a perder la ilusión que habían recuperado en los últimos dos partidos.
En la cancha se escucharon cantos de reclamo hacia el plantel y la dirigencia, y muy pocos de los que se suelen escuchar; esto se debe a la poca energía que tienen todos los seguidores al ver, según sus repetidas declaraciones, a jugadores sin sentimiento por la camiseta granate.
El clima de cancha fue muy amigable, con sol y temperatura estable para ver un buen partido. Los hinchas ingresaron con ganas de ver al Grana y demostrar el apoyo que se demuestra partido a partido. Sin embargo, la energía fue bajando después del primer gol de la visita (Mateo Retegui) a tan solo 3 minutos del inicio del partido. Esta ventaja para Tigre desde el comienzo, fue un golpe duro para el plantel de Lanús (aunque Kudelka declaró en varias conferencias que su estilo es mantener la misma energía) más allá de estar ganando o perdiendo.
Desde el gol, Tigre llegaba mucho más rápido al arco de Fernando Monetti y además, sus pases eran buenos y solucionaban positivamente. Ante esto, el plantel granate presionaba bien pero no lo mantenía. Lo más complicado era que Lanús no conseguía atacar de manera ordenada ya que las jugadas eran interrumpidas por diferentes situaciones; en los momentos que se lograba llegar al arco rival, se notaba mucha falta de confianza y de efectividad. Ante estas subidas y bajadas, Tigre conseguía tener la posesión del balón por más tiempo y atacar rápido, sin la necesidad de molestar intensamente a Lanús. Ya el clima de cancha era cada vez peor.
A partir de cantos más intensos y el enojo de los hinchas, se notó una subida de energía en el equipo al final del primer tiempo. Se generaron más jugadas en la mitad de la cancha y varios tiros de esquina, donde los centros al área eran muy bien ejecutados, pero Tigre lograba despejar su área con mejor saltabilidad, y salía en contraataque rápidamente.
En el entretiempo se notaba un ambiente muy amargo y negativo, y la tarde del sábado parecía que iba a terminar con un resultado desfavorable. También, se escuchaban comentarios en los que se criticaba mucho al equipo y a la falta de sentimiento por la camiseta.
Con una mezcla entre aplausos y silbidos, los hinchas recibieron a los jugadores para el comienzo de la segunda parte. Durante el entretiempo, el DT realizó cambios y entre uno de ellos estaba el de Pepe Sand, quien fue el único que se llevó todas ovaciones y cantos de parte del público. Desde su ingreso, Lanús mejoró y le dio más seguridad y orden, aunque el equipo no logró la conexión total entre ellos hasta el final del encuentro.
El gol de Lanús vino al minuto del inicio de la segundo parte, del ídolo Lautaro Acosta. A partir del empate, el Grana era un poco más efectivo en los pases y recuperación de pelota, y Tigre bajó su rendimiento. Sin embargo, cuando Lanús perdía la posesión el plantel se volvía inseguro y esto le permitía al equipo de Diego Martínez tener posibilidades y seguir manteniendo mejor juego.
Cabe destacar que jugadores como Blando y Boggio (quienes se habrían ganado un lugar después de sus últimas actuaciones) han demostrado ir al frente y jugaron bien individualmente, lo que hizo crecer la ilusión de los hinchas y se llevaron elogios por parte de ellos; pero la falta de entendimiento y el mal partido que hizo Lanús, no les permite ser efectivos. Tal como dijo el DT, la defensa es un problema en Lanús pero también la lentitud que carga el equipo en las transiciones, que es generado por la falta de recursos. Esto es lo más criticado por los seguidores del Grana, los altibajos que presentaron durante el partido fueron muy marcados y el público tiene la incertidumbre constante de saber qué va a pasar. Además, la inseguridad mayor del hincha de Lanús es el arquero Fernando Monetti, quien ha sido responsable del segundo gol de Tigre.
A medida que avanzaba la segunda parte, el equipo comenzó a tener errores nuevamente, y Tigre aprovechaba todas las posibilidades para las salidas rápidas.
Ya sobre el final del partido, el equipo de Diego Martínez estaba muy cerca del arco de Monetti y al Grana le costaba mucho salir de ese lugar, por lo tanto había síntomas de gol y los hinchas ya se conformaron con quedarse con el punto del empate y no perder. Sin embargo, luego de 2 toques en el palo del arco, llegó el gol de Tigre. Monetti dedujo que la pelota se iba por detrás de la meta y sacó las manos, lo que dio el espacio a que la pelota entre. Finalizó el partido y la cancha se vació rápidamente.
Con este resultado, la ilusión volvió a bajar y el enojo volvió a crecer directamente con los jugadores, pero principalmente con el arquero Monetti. Los hinchas piden por Guillermo De Amores (refuerzo), quien ya se recuperó de su lesión, pero Kudelka aún no lo tiene en cuenta para su titularidad.
La falta de sentimiento por la camiseta es notable, y por eso se ve la diferencia cada vez que ingresa Sand o Acosta, más allá de sus edades, porque pertenecen al club y siguen al frente ante los malos momentos.
El beneficio Socio+Acompañante caducó con este partido, lo cual también enojó a los socios, ya que lo que más necesita el club en este mal momento es a su gente. La promoción había generado más apoyo, pero el club tomó la decisión de no sostenerlo hasta el fin del torneo.
Desilusión y amargura son las sensaciones que dejó en la cancha este resultado, que era la oportunidad de Lanús de moverse del último puesto en la Liga Profesional.
Conferencia de prensa Frank Dario Kudelka post Tigre. Mirala en Mega Lanús. Gentileza: Prensa Club A Lanús.
Nota de: Morena Benitez Morello
Periodista, cronista, destacada redactora exclusiva Mega Lanus.
mbenitezmorello@coronet.temp.domains