
El entrenador del Granate sigue en la búsqueda de un modelo claro de juego, aunque desde su llegada no se vio un estilo asentado en el equipo, el cual es uno de los factores que desencadenaron la falta de confianza y carencia de resultados desde hace ya bastante tiempo. Si bien se puso en duda su continuidad, Kudelka confía en su trabajo y en que se puede terminar en una mejor posición lo que queda del torneo.
Desde el triunfo ante Banfield, el equipo tiene otra actitud y encarará a su próximo rival, San Lorenzo, con más seguridad. Sin embargo, el resultado del domingo fue difícil de sostener ya que hubo posibilidades de empate hasta el final; por lo tanto, algunos jugadores resultaron afectados por el esfuerzo y por el ataque directo que recibieron en el encuentro del domingo.
Estas situaciones han sucedido en muchos partidos desde la era Kudelka, y de esta manera se retrasa mucho la idea de imponer un once seguro con ideas de juego claras. Tanto en la delantera, en el medio, en los laterales y en la defensa, se descubrieron muchos problemas de juego a medida que sucedieron los partidos. Esto desequilibra el juego por falta de sustentabilidad y poderío en el mismo. Además, hay un cambio generacional notable en Lanús y para el DT es importante dar seguridad a los jóvenes que tendrán un largo trayecto (si es posible) dentro del plantel Granate. “Ganar el clásico es un bálsamo para el momento, pero fundamentalmente para los jugadores porque esto ayuda a que crean en ellos mismos porque tenemos muy buenos jugadores y tenemos con qué para poder revertir esta situación”, declaró el DT en conferencia de prensa post partido frente a Banfield. No obstante, muchos de ellos son lesionados constantemente y la falta de regularidad en los partidos no ayudan en el crecimiento de los mismos; aunque sí han crecido deportivamente desde su llegada a primera, falta regularidad.
En esta semana, Kudelka debió modificar nuevamente el once titular, que hasta ahora viene siendo bastante regular en los últimos partidos (solo con algunas variantes en cada uno de ellos), por las lesiones de los jugadores que se produjeron el domingo, y por otras cuestiones. Lautaro Acosta (jugador destacado ante Banfield), y Tomás Belmonte recibieron las cinco tarjetas amarillas y están imposibilitados de jugar este partido frente a San Lorenzo. Ambas son bajas costosas de reemplazar: el Toto viene presentando una muy buena conexión en el medio junto con Luciano Boggio y Raúl Loaiza (aunque no del todo asentada), y el Laucha es un colaborador importante en el equipo, es rápido en su posición. Kudelka deberá apostar a Facundo Pérez como titular, y seguramente a Franco Orozco, autor del 2-0 en el clásico. En base a estos cambios obligados, aprovechó a reforzar en estas zonas con dichos jugadores, que presentan dificultades en determinados puntos.
Por otro lado, volviendo a los lesionados, los cambios deberán entenderse con las otras modificaciones obligadas; por este motivo, Kudelka debió hacer más trabajos en grupo con jugadores determinados para llegar a San Lorenzo con algo más de efectividad y confianza entre las variantes.
En este caso particular y para este partido, los laterales defensivos fueron las problemáticas importantes para Kudelka: Braian Aguirre y Julián Aude, nuevamente.
Café es el más complicado ya que, luego del reemplazo en el partido pasado, se le realizaron estudios y el parte médico es un esguince del ligamento colateral interno; estará fuera de las convocatorias un mes, aproximadamente. El flaco Aude ha tenido un torneo inestable desde su paso de reserva a primera: recibió varias expulsiones y fue lesionado en ocasiones. Sin embargo, se está adaptando muy bien y es un jugador en el que Kudelka ha depositado confianza. En este caso, Aude tiene un esguince en el tobillo izquierdo que viene arrastrando y se mostraron imágenes de la hinchazón del mismo, por lo que durante la semana tuvo un trabajo más leve para no seguir forzando la lesión. Igualmente, está convocado para recibir a San Lorenzo, aunque no será titular.
Pepe Sand tampoco no estará en este partido, tras un cuadro gripal.
Semana movida y trabajosa para Kudelka, que deberá seguir buscando seguridad, confianza e ir transformando a un equipo con poderío ofensivo y defensivo (problemáticas importantes). Los entrenamientos fueron más adaptados debido a los cambios, pero aprovechó para practicar conexiones entre otros jugadores.
Ganar el clásico fue un motor de arranque para la semana, pero las inestabilidades seguirán apareciendo hasta establecer, con seguridad, el modelo a seguir. El DT se encarga semana a semana y los jugadores deben colaborar con su búsqueda, además de afianzar las relaciones tanto dentro de la cancha como fuera de ella junto con Kudelka.

Nota de: Morena Benitez Morello
Periodista, cronista, destacada redactora exclusiva Mega Lanús .
Subdirectora general Mega Lanús.
mbenitezmorello@coronet.temp.domains
Agradecimiento a las imagenes de Deportistas 2022